domingo, abril 04, 2010




Hoy preparé la cena.
Llegué, y despues de resignarme a la ausencia del confort que tanto esperé y prometértelo, hice cena para uno.
Me olvidé de la hora, de las dietas y preparé el mejor omelette de mi vida porque era lo único que habitaba en la cocina que aceptarías como valido para una "cena". Hoy quise darte el gusto, aunque el yogurt se puso algo celoso.
Descubrí que es mejor dormir con el estómago lleno que enojado, y que aunque me he adaptado para vivir sola, y sé que lo hago muy bien, disfruto de tu compañía.
La próxima vez cenaré contigo.

Han pasado años y hoy, en San Valentín, he de confesar que a juzgar por las descripciones, tú eres mi valentín. Por cursi que suene y por mucho que odie ese dia de "publicidad barata".
Durante estos breves minutos en que me encuentro en la cocina disfrutando del hielo solitario en mi traslúcido vaso, me despojo de los prejuicios incrustados en mí desde el nacimiento y, admirando el anillo en mi dedo una vez mas, me digo a mí misma: Mí misma, enjoy.